...la primera botella de La Casera y el Sputnik.
Un buen día, cuando estás enfilando los...bueno, muchos años; sientes la añoranza de la vida: miras hacia atrás, más de medio siglo, y ves, como en un panóptico, retazos de cuando todo comenzó...Y entonces viajas, y viajas, y al fin, después de horas, que no sientes pasar -vas al norte-, algo indefinido en el aire, te dice que estás llegando; es algo sutil, entre aromas de pino, ocalito, pradería, y mar, sobre todo la mar. El ricachón franchute de Proust, tendría madalenas en el cajón, pero no le envidias, pues ese salitre de la mar de Cudillero, todavía debe de correr por tus venas. Es el reconocimiento de algo inconfundible, como bien sabemos los trasterrados. Durante esa larga cabalgada, mientras vas dejando atrás la ya familiar llanada...