1.- El texto que sigue, no es una novela, al menos al uso, tampoco un ensayo. No lo quiere ser, quiere moverse más comodamente en ese territorio difuso, variante, de la intertextualidad. Ni lo uno, ni lo otro, todo lo contrario.
Érase un 'pobrecito escribidor' que, ya muy vivido, no olvidaba cómo le había impresionado Larra en la adolescencia, cincuenta años atrás. Con aquel pistoletazo de Werter, cuyo eco siguió resonando en la cabeza romántica hasta confundirse, en el último instante, con el disparo real. Pero, por suerte, quedaron más cabezas románticas: el canto a la libertad del pirata, aprendido en aquella escuela, como una proa al mar que, rodeada de viejas barcas era como una invitación al corso. Así, que cuando el escribidor se fue retirando de homo laborans (Sí, habría que decir animal laborans, pero uno se resiste, le parece una tremendidad), no había olvidado el gusto por la heteronomía, como Don Fernando Pessoa. Y por qué no iban a bienconvivir un pirata y un escribidor. Y aun algos, que diría Sancho.
Ya mentados, sólo queda por anunciar que se escribirá sobre, además de literatos, de alguna filosofía de la vida y otras cosa que pasan. En gallego: dépende.
Ya mentados, sólo queda por anunciar que se escribirá sobre, además de literatos, de alguna filosofía de la vida y otras cosa que pasan. En gallego: dépende.
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