...después de casi un mes, este "pobrecito escribidor" ve lo que le interesa al lector -los chivatos informáticos indican lo que la gente lee. No quiénes, naturalmente-, y el personal sufre lo que le gusta al "pobrecito escribidor". De manera que, como no suscita demasiado interés -por ahora-, el asunto de "la Condición humana ", y hemos largado suficiente de los "virus" y de los "contagios"; inclusive de los de más allá del Ebro (nacionalitis inflamada, crónica), parece claro, que al personal siempre le entretiene el tema de la yenka (sí: izda-dcha; izda-dcha, etc).
Así, plantearemos directamente dos tesis de rabiosa actualidad. En primer lugar la de Thomas Piketty:
"MIENTRAS LA RETRIBUCIÓN (el rendimiento) AL CAPITAL SEA MAYOR QUE EL CRECIMIENTO ECONÓMICO DE UN PAÍS, SE INCREMENTARÁ LA DESIGUALDAD".
Todavía más claro, esta diciendo: "mientras la retribución del capital* sea, proporcionalmente, más alta que la del trabajo, no cesará de aumentar la desigualdad económica".
Esa afirmación de Piketty, provocó, que del Financial Times pa'riva o pa'un lao, fuera, naturalmente, acusado de marxista-leninista y aun más.
El muchacho, joven economista, replicó, que ni siquiera había leído a Marx, que tal afirmación había salido del estudio de las Series (estadísticas) históricas de los últimos 200 años**. Y resumía su "economía política" en un sólo dato: un consejero delegado de una "corporación" gana en una hora, lo que uno de sus obreros en unos nueve meses (por los plazos parece un buen polv... y un mal parto; unos lo disfrutan y otros lo sufren).
Concluye, el joven economista -que no leyó "el Capital"-, coincidiendo con otros colegas notables***, que el problema, más allá de moral o económico, es sobre todo político: está en esos 700 billones (10 elevado a 12, diez veces el PIB mundial) "acumulados", que los "fondos buitre y de otras clases" mueven, al año, en SWAP's y otras minucias. Entiende Piketty, y unos pocos más, que esa realidad amenaza la meritocracia, la cultura del esfuerzo, la economía de mercado y, en suma, la cohesión social justa, sobre la que "funciona" el sistema democrático mejor que conocemos.
* "Las relaciones de producción", que se dan entre la retribución del trabajo y la del capital. Carlos Marx, dixit.
** Esa tendencia, sólo se había interrumpido con las políticas keynesianas, respuesta de Roosevelt, tras el desastre de "la gran depresión".
Y en segundo lugar:
-PERO OTRO ECONOMISTA, NO MENOS CÉLEBRE AHORA MISMO, OPINA QUE VAMOS HACIA UNA ESPECIE SOCIEDAD DE TRUEQUE, DE INTERCAMBIO DE BIENES Y SERVICIOS, EN UN "PROCOMÚN SOCIAL"-. Mañana veremos...
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